Un reciente estudio de la Universidad Johns Hopkins muestra que, cuando utilizan mapas mentales, los estudiantes consiguen calificaciones un 12 % superiores.
Este incremento se atribuye a la forma en que los mapas mentales ayudan a los estudiantes a organizar las ideas y comprender mejor los conceptos. Con ello, no solo se reduce el tiempo que se tarda en asimilar nueva información, sino que esa nueva información se integra en la memoria a largo plazo de manera más eficaz. Incorporar colores e imágenes a los mapas mentales puede ayudar aún más a los estudiantes, ya que las señales visuales permiten recordar la información más adelante, por ejemplo durante exámenes o presentaciones.
Aunque tanto educadores como estudiantes utilizan el papel para plasmar los mapas conceptuales y mentales desde hace muchos años, eso ha cambiado con la introducción del software de pensamiento visual, en concreto con las herramientas para mapas mentales. Estas herramientas han automatizado el proceso de elaboración de los mapas mentales y ha mejorado su eficiencia para reflejar una lluvia de conceptos en forma de ideas o ramas. Además, algunos softwares de elaboración de mapas mentales se integran con MS Office y Google, lo que les permite a los estudiantes convertir sus ideas en documentos con otros formatos, como Word o PowerPoint.
Pero profundicemos un poco más. Una redacción o una tarea de deberes típica a menudo se escribe siguiendo un formato lineal o jerárquico (de arriba a abajo). Sin embargo, trabajar con ese formato puede resultar difícil, sobre todo para aquellos estudiantes que tienen dificultades para secuenciar la información de esa manera.
Los mapas mentales son una forma no lineal o radial de organizar la información que resulta más adecuada para el método de pensamiento orgánico. Los mapas mentales hacen más sencillo producir ideas y ayudan a articular los pensamientos de manera más coherente.
Los pedagogos respaldan ampliamente los mapas mentales como herramienta de apoyo para los estudiantes con dificultades específicas del aprendizaje tales como la dislexia y las condiciones del espectro autista (CEA).
Una dificultad del aprendizaje o neurodiversidad se define como "un trastorno que da lugar a dificultades para adquirir conocimientos y habilidades del nivel que se espera de las personas con una misma edad, especialmente cuando no está asociado a una discapacidad física".
Si bien existe un elevado número de dificultades de aprendizaje o neurodiversidades diferentes, muchos de sus diagnósticos comparten los mismos síntomas. Por ejemplo, la dislexia, el TEA, el TDAH y el TPA comparten al menos uno de estos síntomas: escasa retención de memoria, problemas para procesar y organizar la información o dificultades de comunicación. (Más información)
Si bien existe un elevado número de dificultades de aprendizaje o neurodiversidades diferentes, muchos de sus diagnósticos comparten los mismos síntomas. Por ejemplo, la dislexia, el TEA, el TDAH y el TPA comparten al menos uno de estos síntomas: escasa retención de memoria, problemas para procesar y organizar la información o dificultades de comunicación. (Más información)
La Asociación Británica de Dislexia afirma lo siguiente: "Los disléxicos tienen dificultades con el lenguaje hablado o escrito, para seguir instrucciones, una escasa capacidad de concentración y al realizar tareas analíticas o lógicas. Estrategias tales como los mapas mentales están reconocidas como herramientas de aprendizaje valiosas". Referencia: Asociación Británica de Dislexia, www.bdadyslexia.org.uk.
¿Le resulta familiar? Se trata de dificultades habituales de los alumnos disléxicos. Aunque muchos alumnos comienzan a utilizar los mapas mentales y se sirven del lápiz y el papel para elaborarlos, existen varios programas de software que pueden hacer que el proceso de creación de mapas mentales sea menos engorroso y más atractivo. (Más información)
Aunque el Asperger se considera la forma más leve de autismo, son muchas las dificultades habituales que deben superar los estudiantes y los profesionales en ejercicio para desarrollar eficazmente sus actividades diarias. El síndrome de Asperger, que a veces se denomina "autismo de alto funcionamiento", afecta a la comunicación, la organización y la memoria.
Si desea más información sobre cómo ayudan los mapas mentales a las personas con Asperger, tiene más detalles aquí.