Un mapa mental es una manera sencilla de plasmar pensamientos de forma orgánica sin preocuparse por el orden ni la estructura. Le permite estructurar visualmente sus ideas para ayudarle a analizarlas y recordarlas.
Un mapa mental es un diagrama para representar tareas, palabras, conceptos o elementos vinculados con un concepto o tema central y dispuestos alrededor de este por medio de un diseño gráfico no lineal que le permite al usuario construir un marco intuitivo en torno a un concepto central. Un mapa mental puede transformar una larga lista de información monótona en un diagrama colorido, fácil de recordar y muy organizado que refleja la forma natural de hacer las cosas del cerebro.
Aquí tenemos un ejemplo de esquema de planificación de unas vacaciones. Se puede examinar la lista de lugares y actividades en cuestión de segundos. Pero, cuando llegue usted al final del esquema, ¿recordará aún lo que ha leído al principio?
Tomemos esa misma información y observémosla en forma de mapa mental. Ahora puede contemplar la información mucho más rápido y recordar los datos mucho más fácilmente.
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Si está buscando ejemplos de mapas mentales o software para elaborarlos, no deje de echarle un vistazo a esta revisión de software para crear mapas mentales (inglés).
Cuando se estudian las funciones del cerebro y el funcionamiento de la memoria, se pone de manifiesto hasta qué punto son extraordinarias su capacidad y su potencial. El mapa mental es una herramienta que se utiliza para atraerle, hacerle disfrutar, estimularle y plantearle retos. Descubrirá hechos asombrosos sobre su propio cerebro y su funcionamiento y dará los primeros pasos importantes del camino hacia la liberación de su mente.
Cómo aprovechan el poder del cerebro los mapas mentales
Un mapa mental es un método muy eficaz para introducir y extraer información del cerebro: es un medio lógico y creativo de tomar y crear notas que consiste, literalmente, en cartografiar sus ideas.
Todos los mapas mentales tienen elementos comunes. Cuentan con una estructura organizativa natural que se extiende de manera radial desde el centro y que se sirve de líneas, símbolos, palabras, colores e imágenes para ilustrar conceptos sencillos y lógicos. Permiten convertir una larga lista de información monótona en un diagrama colorido, fácil de recordar y muy organizado que refleja la forma natural de hacer las cosas del cerebro.
Para entender mejor qué es un mapa mental, podemos compararlo con el plano de una ciudad. El centro de la ciudad representa la idea principal; las avenidas principales que surgen del centro representan los pensamientos clave del proceso mental; las calles menores o ramas representan los pensamientos secundarios, y así sucesivamente. Imágenes o formas especiales pueden representar monumentos o ideas particularmente importantes.
El mapa mental es un espejo externo que refleja el pensamiento radial o natural con ayuda de un poderoso proceso gráfico, y proporciona la llave maestra para acceder a todo el potencial dinámico del cerebro.
Casi al mismo tiempo en que se empezaron a emplear los mapas mentales, otra importante investigación científica confirmó su validez como método de pensamiento compatible con el cerebro. En California, el Dr. Roger Sperry, que ganó un Premio Nobel por esta investigación, confirmó que la parte más reciente en el desarrollo evolutivo del cerebro, la "capa pensante" del córtex cerebral, estaba dividida en dos hemisferios, y que cada uno de ellos llevaba a cabo una serie completa de tareas intelectuales, denominadas habilidades corticales. Las tareas en cuestión eran estas: lógica, ritmo, líneas, color, listas, ensoñación, números, imaginación, palabra y estructura general (tener una visión de conjunto).
El estudio de Sperry confirmó que cuanto más integradas estaban estas habilidades más aumentaba el rendimiento del cerebro. Cuando se elaboran mapas mentales, no solo se practican y ejercitan las capacidades fundamentales de la memoria, sino que también se activan ambos hemisferios, lo que mejora la claridad, la estructura y la organización del pensamiento.
Un mapa mental también hace uso de la imaginación, la asociación y la localización. Se puede considerar que el mapa mental es la herramienta definitiva, ya que recurre de manera constante a ambos lados del cerebro.
Si la capacidad de pensamiento radial del cerebro se puede aplicar a la "habilidad cortical izquierda" que representan las palabras, ¿se puede aplicar también a la "habilidad cortical derecha" que representan la imaginación y las imágenes? En 1970, la revista Scientific American publicó un estudio de Ralph Haber que mostraba que las personas reconocen las imágenes con una precisión de entre el 85 y el 95 por ciento. La frase "una imagen vale más que mil palabras" es bien conocida.
Asociamos y recordamos imágenes porque hacen uso de una enorme variedad de habilidades corticales, sobre todo de la imaginación. Las imágenes pueden ser más evocadoras que las palabras, resultar más precisas y poderosas a la hora de desencadenar un gran número de asociaciones y, por lo tanto, mejoran el pensamiento creativo y la memoria. Estos hallazgos respaldan el argumento de que los mapas mentales son herramientas particularmente útiles. Porque no solo usan imágenes, sino que son imágenes.
Si bien el uso de la técnica de organización gráfica radial basada en una imagen central para crear mapas viene de antiguo, el autor de obras de psicología británico Tony Buzan se atribuye la invención de los mapas mentales. Sostiene que los esquemas "tradicionales" exigen que el lector recorra la información de izquierda a derecha y de arriba abajo; mientras que lo natural para el cerebro es explorar toda la página de modo no lineal.
Buzan también se basa en teorías generalizadas sobre los hemisferios cerebrales para proponer el uso de los mapas mentales exclusivamente frente a otros métodos de toma de notas. Tony Buzan tiene varias marcas comerciales registradas en relación con los mapas mentales, como los términos en inglés Mind Map y Mind Mapping.
Un estudio de la Universidad Johns Hopkins indica que los estudiantes que utilizan mapas mentales consiguen calificaciones un 12 % superiores.
Asimismo, se ha demostrado que los mapas mentales son útiles para que los estudiantes disléxicos y autistas comprendan mejor los conceptos y las estrategias. De hecho, la Asociación Británica de Dislexia afirma lo siguiente: "Los disléxicos tienen dificultades con el lenguaje hablado o escrito, para seguir instrucciones, una escasa capacidad de concentración y al realizar tareas analíticas o lógicas. Estrategias tales como los mapas mentales están reconocidas como herramientas de aprendizaje valiosas".